Dendrolivano Minia

Reseña de un crítico de hotel

Recientemente tuve el placer de disfrutar de una escapada a Kefalonia, alojándome en el hotel Dendrolivano, un auténtico rincón de tranquilidad rodeado de una vibrante naturaleza. Desde el momento en que llegué, la hospitalidad griega se hizo evidente, particularmente a través del saludo cálido de Siora Stella, quien se encargó de nuestro desayuno en una cesta, una delicia que combinó sabores locales con un toque especial. La oferta gastronómica de la Taverna/Coffeehouse es un festín; me encantó el saganaki de marisco y el calamar frito, platos que, sin duda, son una celebración de los sabores del Mediterráneo. Además, el bar de la piscina proporcionó una experiencia relajante, ideal para disfrutar de un cóctel mientras la brisa del mar acariciaba nuestra piel. El entorno no se queda atrás, con acceso a playas de una belleza indescriptible, ideales tanto para quienes buscan un día de relax como para aquellos ávidos de explorar. Sin duda, Dendrolivano es un lugar perfecto para desconectar y sumergirse en la magia de Kefalonia, un viaje que nunca querrán abandonar.